Tras acabar el primer trimestre con muy buen arranque de la renta variable europea, comienza el segundo trimestre sin grandes novedades. De los movimientos de las últimas sesiones destacar que el euro vuelve a debilitarse frente al dólar, y el petróleo presionado por el conflicto bélico en Yemen vuelve a la baja. La renta variable europea continúa la senda alcista, siguen las dudas en Estados Unidos y los mercados emergentes continúan sin tener una tendencia clara. La renta fija totalmente apoyada por los bancos centrales, e incluso vuelven las compras de los bonos europeos a pesar de que no terminan de llegar buenas noticias desde Grecia.
Entramos en un periodo propicio para consolidar las subidas. Hasta dentro de un par de semanas no comenzarán a publicar los resultados del primer trimestre las compañías cotizadas para poder hacernos una idea de si la recuperación económica se está trasladando al resultado de las compañías. Las bolsas no están baratas ya que si miramos las fuertes subidas y los últimos beneficios publicados sin grandes subidas respecto al primer trimestre del año pasado provocan repuntes del ratio PER. En el siguiente pantallazo de bloomberg se aprecia que la mayoría de principales índices cotizan a PER superiores a 20x.
Evidentemente el PER se refiere a datos pasados. A futuro el mercado descuenta que los beneficios por acción mejorarán en los próximos trimestres y por tanto los PER estimados son bastante más bajos. Hoy, con los beneficios que el mercado descuenta para 2015, el S&P500 cotiza a un per estimado de 15.5x, el Eurostoxx a 14.35x, el DAX a 14.05x, el Ibex a 14.30x, el MSCI Emerging markets a 10.95x y el Nikkei a 18x. Son ratios más razonables, de ahí que insistamos en la importancia de los primeros datos que se publiquen. Si se superan expectativas, provocará revisiones al alza de los beneficios y consecuentemente caídas de los per estimados, lo que abaratará las bolsas.
Así pues, lo que está ocurriendo, es que aunque las bolsas no están baratas, están superando resistencias adelantando que la mejoría de los beneficios terminará por llegar. Eso genera que los inversores aprovechen cualquier recorte para incorporarse al mercado. Hoy por ejemplo vemos cómo el Ibex está superando los máximos de la semana pasada y apenas hubo dos días de correcciones tras el amago de giro bajista en la importante cota de 11.500 puntos.
El gráfico es sólo de los últimos meses, pero si ampliamos el horizonte (gráfico de velas semanales) vemos que una vez que se superó la zona de 11.200 puntos no hay otra resistencia hasta la zona de 12.000 puntos.
Además, no sólo los datos micro (resultados de compañías) parecen apoyar, ya que los datos macro europeos siguen superando previsiones. Hoy mismo los datos de PMI manufacturero de Alemania y Francia han mejorado expectativas. En el índice de sorpresas macro elaborado por Citigrup, se aprecia cómo desde octubre los datos macro europeos (línea blanca) siguen saliendo mejor de lo esperado.
Contrasta claramente con las sorpresas macro de Estados Unidos. Siguen defraudando expectativas. Ayer mismo se publicó el PMI de Chicago por debajo de 50 puntos y bastante inferior a lo descontado por el mercado (46.3 frente a 51.5 esperado). Este dato suele estar muy correlacionado con el ISM manufacturero de Estados Unidos que a su vez es un indicador adelantado del PIB de la principal economía del mundo. En el siguiente gráfico de bloomberg se aprecia la evolución de los tres indicadores.
Sin duda la caída del PMI de Chicago con dos lecturas bastante por debajo del nivel de 50 es preocupante. Puede ser que le echen la culpa al frio invierno cómo ocurrió el año pasado, pero a buen seguro provocará que los analistas revisen a la baja los siguientes datos macro. Lo positivo de esto es que mientras menos sorpresas positivas macro haya en Estados Unidos, menos probable es que la FED adelante la subida de tipos. En fin, que cuando la tendencia es alcista, es fácil buscar excusas para ser optimista. Y es esto lo que está ocurriendo en las bolsas en este inicio de año, sobre todo en las bolsas europeas. Se está descontando todo lo bueno y lo malo no pesa. Incluso me atrevería a decir que si mañana se decide que Grecia sale del Euro, no tendría por qué afectar a las bolsas y bonos europeos. Es más, la mayoría de inversores aprovecharía la volatilidad del momento para aumentar más riesgos en Europa.
Por último quiero actualizar el gráfico de la evolución de las expectativas de inflación en la eurozona.
Desde que se anunció el QE por parte de Draghi, se giraron fuertemente al alza. Las expectativas a 1 y 5 años ya están en torno al 1%. También es destacable el repunte de las de 10 y 30 años. Sin duda el repunte de las expectativas de inflación es bueno para la bolsa y la economía en general y malo para los bonos. Viendo este gráfico, con un claro diferencial entre el bono a 10 años alemán y las expectativas a 5 y 10 años, está claro que los bonos ofrecen peor binomio rentabilidad riesgo que la renta variable. La única explicación para ver al bono alemán tan bajo es la fuerte demanda por parte del BCE.