Charlie Munger (969, vicepresidente de Berkshire Hathaway y socio de Warren Buffett desde hace décadas, emitió una terrible advertencia sobre el futuro el pasado miércoles, en la que es una de las notas más pesimistas que se recuerda del veterano inversor.
"Creo que se avecinan muchos problemas", dijo en la reunión anual de accionistas del Daily Journal de Los Ángeles, donde también señaló que "hay demasiados excesos".
Munger - que preside la editorial - destacó los riesgos en los que están incurriendo los ciudadanos chinos. Según sus propias palabras: "en China, lo que se hace es apostar como si se tratara de un juego más que una inversión, algo realmente estúpido. Es difícil imaginar algo más tonto que la forma en que los chinos invierten en acciones."
Y en EE.UU. los inversores se enfrentan a riesgos, que van desde el impacto del coronavirus en la economía, hasta la incertidumbre política de las próximas elecciones presidenciales. Además, el Tesoro anunció el miércoles que el déficit presupuestario de EE.UU. aumentó en un 25% en los primeros cuatro meses del período fiscal 2020 hasta los 1,06 billones de dólares y, a pesar de ello, el Dow Jones Industrial Average y el S&P 500 alcanzaron máximos históricos el miércoles.
Una forma creativa de medir los beneficios
A la hora de hablar de estos excesos, Munger citó la proliferación de EBITDA como una métrica errónea a la hora de medir los resultados corporativos, señalando que "no me gusta cuando los banqueros de inversión hablan de EBITDA, ya que es una métrica que usan los alcistas para justificar cualquier precio".
"Es ridículo", dijo Munger, señalando que el EBITDA - que es la abreviatura de ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización - no refleja con exactitud cuánto dinero gana una empresa, a diferencia de métricas de ganancias tradicionales. "Piensen en la deshonestidad intelectual básica que es el que empiecen a hablar de EBITDA ajustado. Casi estás anunciando que eres un fraude".
Las acciones de Uber repuntaron la semana pasada, después de anunciar que habían aumentado su objetivo de "rentabilidad del EBITDA" para el cuarto trimestre de este año. También señaló que a pesar del fuerte optimismo existente, no se está como en los años 70, cuando las Nifty Fifty, al menos que aún no se está ahí.
Pero eso no es todo lo que le preocupa a Munger. También dijo que el auge de la innovación que ha experimentado a lo largo de su vida, podría comenzar a disminuir. Creo que mi generación tuvo lo mejor de todo este cambio tecnológico en el que estamos", dijo Munger, de 96 años, señalando que la medicina ha mejorado dramáticamente durante su vida, mientras que los inventos como el aire acondicionado han aumentado el nivel de vida. "No creo que vayamos a conseguir tanta mejora en el futuro porque ya hemos conseguido mucho."
Inversionistas de todas las tendencias esperan con impaciencia el discurso anual de Munger, debido a la amplia sabiduría que muchos le reconocen. Munger también es considerado como uno de los mejores inversores y pensadores empresariales de la historia. Antes de unirse a Buffett en Berkshire, Munger dirigió una sociedad de inversión que obtuvo un promedio del 20% anual entre 1962 y 1975. Mientras tanto, el S&P 500 tuvo un promedio de rendimiento anual de sólo el 5% en ese tiempo.
