Siempre me han apasionado las artes marciales y hace tiempo que
quería escribir este artículo. Cuando era más joven practiqué varios
estilos: Taekwondo, Karate, Wing Chun, Wing Fight, Jeet Kune Do...,
hasta que tuve un problema con mi rodilla y hoy en día practico de
manera mucho más suave. Como deporte me encanta, pero lo que más me
marcó fue su filosofía, la forma de pensar.
Como muchos chiquillos me entró el gusanillo de las artes marciales
gracias a las películas de Bruce Lee y, más adelante estudié sus ideas
plasmadas en el «Tao of Jeet Kune Do». Lo que quizás mucha gente no
sepa es que Bruce Lee, además de actor y artista marcial, fue filósofo;
de hecho estudió Filosofía en la Universidad Estatal de Washington. Gran
parte de su filosofía está inspirada en el Taoismo y el Zen, además de
Spinoza, Hegel, Khirsnamurti, etc...
Personalmente esa forma de pensar me ha ayudado mucho en los
mercados, además de usar un sistema, la actitud, la forma de pensar y
sentir es determinante. Un pensamiento que me ha inspirado muchas veces
es que el Tao, como el mercado, es incognoscible, lo abarca todo pero es
inabarcable. Como la vida misma, no puedes conocer todas las variables,
todo lo que lo compone y, no puedes saber a ciencia cierta lo que
ocurrirá mañana porque siempre existen variables que se te escapan,
aunque sí puedes tener una idea de lo que resultará más probable y
actuar en consecuencia. «En el caos busca la simplicidad y en la discordia la armonía».
Como decía antes, además de la aptitud, la actitud es
clave. Es común leer que el mercado es tu amigo pero, personalmente,
prefiero enfocar mis entradas al mercado como un combate. En un combate
nunca sabes lo que va a ocurrir pues el combate, como el mercado, está
vivo y abierto, hay que dejar de lado las emociones, controlarlas, y
confiar en ti y en lo aprendido, y nunca subestimes a tu contrincante,
al igual que nunca debes subestimar al mercado y confiarte. Cónocete a
ti mismo, para conocerse a uno mismo hay que interactuar con las
personas, con las situaciones, hay que saber como te enfrentas a una
operación, qué sientes, qué haces en una situación determinada; ser
consciente de que no puedes ser especialista en todo, conoce tu estilo y
perfecciónalo. «Conviértete en muñeco de madera. No tienes
ego, no piensas nada, no eres codicioso… Deja que el cuerpo se
desenvuelva con lo que ha aprendido».
Es importante
que, cuando has practicado una técnica y la controlas, llegué el momento
en que el cerebro se aparte y deje que el cuerpo haga lo que debe, lo
que ha practicado; pensar demasiado no siempre es bueno. Si tus
posibilidades son pocas, no es una vergüenza eludir el combate cuando
puedes hacerlo y no es necesario (no tienes porqué estar siempre
invertido). En un combate es muy importante el momento, el «timing»,
vigila las fintas (engaños) de tu contrincante y, cuando lo tengas
claro, debes golpear como una serpiente; hay que tener claro que en toda
lucha vas a recibir golpes y debes proteger tus puntos vitales
(gestiona el riesgo, usa stops si tu sistema lo ve necesario), en
palabras de Bruce Lee: «Sincronizar un golpe es el secreto para golpear potentemente». «Si crees que tienes un hueco, lánzalo, pero sin dudarlo».
En las artes marciales existen infinidad de técnicas y de sistemas,
es un arte y una ciencia, respeta los otros estilos, todos son buenos,
coge el que mejor se adapte a tu forma de ser y recuerda que ninguna
técnica es inmutable, adáptala a ti, hazla tuya y no seas como el agua
estancada que acaba pudriéndose, no te estanques, sigue aprendiendo.«Investiga en tus propias experiencias, para llegar a entender qué funciona para ti». «Adapta lo que es útil, rechaza lo que no sirve para nada, y añade lo que es específicamente tuyo propio». «Use sólo lo que funciona, y tómalo desde cualquier lugar que puedas encontrar».
Concéntrate en tu chi, tu energía, ahorra energía, no la gastes
innecesariamente (no malgastes tu capital en operaciones tontas). Un
sistema bueno es simple, no tiene mil indicadores, como decía Bruce Lee: «El súmmum de la práctica lleva a la simplicidad. Una practica a medio camino lleva a loornamental».
«Ante todo minimiza todo movimiento de forma que te muevas lo justo
para conseguir un efecto máximo sin lanzar ganchos a lo loco». Recuerda que «La simplicidad es la clave de la brillantez».
Antes de lanzarte como un loco debes controlar la técnica, practica, estudia, usa demo, pruébala: «Un combatiente debe alcanzar un buen nivel de capacidad técnica antes de que pueda aplicar las tácticas con éxito». Cuando la controles no la abandones por otra a la primera de cambio: «Yo no temo al hombre que ha lanzado 10.000 patadas diferentes, yo temo al hombre que ha lanzado una patada 10.000 veces».
Si te equivocas y cometes errores no te castigues, recuerda que «Los errores son siempre perdonables, si uno tiene el coraje de admitirlos». Sigue tus metas, lucha por ellas, cumple tus expectativas no la de los demás, «No
estoy en este mundo para vivir a la altura de tus expectativas y tú no
estás en este mundo para vivir a la altura de las mías». Aprovecha el tiempo, el tiempo no vuelve, hemos oido la frase de que el tiempo es tu mejor activo, Bruce Lee decía que: «Todos
tenemos tiempo para aprovechar o para perder y es nuestra decisión qué
es lo que hacemos con él. Pero ten en cuenta que una vez pasado, jamás
se recupera».«Si amas la vida, no pierdas el tiempo, de tiempo está hecha la vida». Tener un objetivo y cada día «Debes realizar por lo menos un movimiento diario que te acerque más a tu meta».
Recuerda que el dueño de tu actitud eres tu mismo, moldéala, úsala en beneficio de tus objetivos: «Cesa
el parloteo mental negativo. Si crees que algo es imposible, lo harás
imposible. El pesimismo embota las herramientas que necesitas para tener
éxito». «Elija
ser positivo. Usted tiene esa opción, es el dueño de su actitud. Elija
ser positivo, constructivo. El optimismo es el hilo conductor hacia el éxito».
Recuerda buscar la simplicidad, practicar, protegerte, no estancarte,
usar lo que funciona, practicar el arte de luchar sin luchar (dejar
correr los beneficios) y ser tu mismo en todas las situaciones,
adaptarte a ellas, ser flexible y no rígido: «Vacía
tu mente, se amorfo, moldeable, como el agua. Si pones agua en una taza
se convierte en la taza. Si pones agua en una botella se convierte en
la botella. Si la pones en una tetera se convierte en la tetera. El agua
puede fluir o puede golpear. Sé agua amigo mío»
BE WATER MY FRIEND.