Apple vive su propio flash crash

29 de marzo, 2012 0
Analista y Gestor de Fondos en Metagestión
Analista y Gestor de Fondos en Metagestión

No es la primera ni la última vez que esto ocurre, pero esta vez ha afectado a la mayor empresa del mundo por capitalización bursátil. 

Las acciones de la tecnológica APPLE se desplomaban el pasado viernes un 9% en un minuto por una orden errónea. Tal como sucedía en otras ocasiones, en cuestión de segundos se volvía a cerrar ese hueco marcado por la abrupta caída. El valor, que vale en bolsa actualmente más de 550.000 millones de dólares, perdía casi 50.000 millones de dólares verticalmente (aproximadamente la misma cuantía que los ajustes que tiene que hacer España para cumplir las exigencias de la UE con respecto al nivel de déficit público).

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Entonces, ¿es posible aprovechar estos “fallos de mercado”? ¿Un mortal que ni lleva traje,  ni vive en Londres, ni trabaja para una multinacional, puede ganar dinero con estas operaciones? 

Efectivamente es posible aprovechar las circunstancias de mercado donde el valor de los activos y su precio tienen un gap que merece la pena intentar atrapar. Pero no estoy hablando del day-trading. Me refiero al caso del value investing. 

La versión más clara de lo que sentían los traders el viernes en Apple es la que siente cada mañana un value investor cuando ve sus acciones cotizando a un precio muy inferior al que efectivamente piensa que deberían estar cotizando. 

Por eso, al igual que Jim Cramer veía los euros cayendo en la cartera de otros,  nosotros intentaremos aprovechar esas oportunidades en las que los activos se encuentran infravalorados, para poder conseguir la plusvalía del modo más ortodoxo. Y si no, vean como Cramer se desespera viendo a Procter & Gamble caer un 30%:



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El mercado al final reconoce los negocios de calidad como Procter & Gamble (1) y  termina despreciando historias como la de Apple, fabricante hoy en día del producto estrella del planeta, pero con precedentes drásticos en su sector, como es el caso de Motorola y Nokia, anteriores líderes que hoy en día ya no figuran en el mapa.

Y si no lo creen, comprueben la rapidez con la que desapareció el liderazgo de la finlandesa.




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