Febrero de 2015 en la bolsa americana. Ese mes se cerró con el máximo posicionamiento mensual por parte de las manos fuertes en el S&P 500. Los meses sucesivos han sido de constante deterioro hasta los acontecimientos del pasado agosto y de lo que llevamos de mes actual. La desaceleración de las posiciones de los que mueven el mercado esta rozando la contracción. Es evidente que a final de mes se podrá hacer un mejor balance pero de momento es el peor inicio de año desde 1928.
Los "reversals" mensuales de los futuros del VIX eran significativos en junio de 2010 y en octubre de 2011 pero ahora parece distinto.
Las envolventes mensuales de momento brillan por su ausencia, dando, además, la sensación de suelo en estos futuros del VIX.
El Dow Jones Industrial es el indice top americano más reticente en testear el soporte de agosto, en cambio es el primer indice en perforar a la baja su macd trimestral en el poco tiempo que llevamos de trimestre.
El corte es provisional, está claro, pero no parece casual. Los últimos cortes trimestrales a la baja datan del segundo trimestre de 2008, del primer trimestre de 2001 y del remoto 1982. Así pues, la panorámica del último año en el indice no parece una acumulación standard como hemos visto otras tantas veces.
Las distribuciones de las manos fuertes ya se notaban muchos trimestres anteriores a los momentos de pánico.
A partir de la crisis asiática de 1998 el nivel de posicionamiento de las manos fuertes comenzó a declinar pero las caídas y la recesión no vinieron hasta 2001. Lo mismo sucedió a partir del último trimestre de 2006 que fue el periodo más alto del bajo posicionamiento de las manos poderosas pero no fue hasta 2008 que cundió el pánico. En el caso actual fue el ultimo trimestre de 2013 el punto mas álgido, comenzando luego la distribución al sufrido publico hasta la fecha.
El pánico en 2016 todavía no ha llegado a tenor de que el indice Vix de volatilidad está bastante por debajo del pánico de agosto a pesar de que el S&P 500 ha testeado esta semana el gran soporte.
Los nuevos mínimos del NYSE han cerrado la semana por encima de 1000, un nivel preocupantemente más alto que el del pasado agosto.