En el verano del 2015 la obsesión fue la devaluación del yuan, mientras que en el inicio del 2016 era la evolución del petróleo. Incluso el año pasado eran las declaraciones de Trump y el líder norcoreano Kim Jong-un en torno a un posible conflicto nuclear las que justificaban cualquier movimiento del mercado. En las correcciones iniciales de febrero, era el temor a una subida agresiva de tipos por parte de la FED lo que movía a los mercados. Y estas últimas semanas todo queda eclipsado por las declaraciones de Trump o cualquier miembro de su Gobierno, o desde China, con ánimos de tensionar o relajar el conflicto comercial entre ambos países.
Desde hace varias jornadas, venimos apostando a que estas amenazas forman parte de una dura negociación entre ambos países para poder obtener un acuerdo bilateral para recular el comercio. Esta madrugada por ejemplo, los futuros de la bolsa de Estados Unidos se han girado al alza tras un discurso muy importante del presidente chino Xi en el foro de Boao, conocido por el Davos de Asia. Xi ha decidido relajar el cruce de amenazas de imposición de aranceles y ha lanzado un mensaje que claramente apoya a las bolsas. Por un lado, que va a abrir mercados. Por otro, que va a bajar tarifas de importación de vehículos. Igualmente ha hablado de respetar la propiedad intelectual extranjera y pide que se respete la propiedad intelectual china en el extranjero.
Por lo tanto, Xi pide un acuerdo con EEUU y esto rebaja fuertemente la posibilidad de una guerra comercial. Y como consecuencia el mercado está subiendo. La euforia no es desmedida quizás porque tras una buena noticia o rumor, en breve le sigue nuevas amenazas. En el siguiente gráfico del futuro del S&P500 en barras de 60 minutos podemos ver que desde el pasado 22 de marzo, este índice se mueve en un lateral de algo más de un 3% de rango con altibajos constantes.
Mientras no se salga de este rango es complicado apostar a cuál será el sentido del siguiente tramo del S&P500 en particular y de las bolsas en general. La bolsa de China ha subido con fuerza esta madrugada tras estas declaraciones, pero corren rumores de que podría haber devaluación de yuan y ya sabemos cómo reaccionó el mercado a las últimas medidas similares. En el gráfico del Hang Seng vemos que el índice se distancia claramente de los mínimos de febrero y media de 200 sesiones. Se aprecia en el gráfico que los mínimos de este mes coinciden con la línea que une mínimos desde agosto del año pasado.
Sea este el rebote bueno o no, lo que está claro es que el Hang Seng presenta una estructura alcista de precios. En Europa es el sector de automoción el que mejor se comporta (bajará impuesto a la importación de vehículos), por lo que es el Dax el índice europeo que más sube. En el gráfico se aprecia que de nuevo se ha situado en la zona de máximos de marzo y justo está atacando a la media de 50 sesiones. Es decir, la parte alta del canal lateral por el que venimos apostando desde hace semanas.
Lo mismo ocurre con el Eurostoxx (con dividendos). Hoy cotiza ligeramente por encima de la media de 50 sesiones y en zona de máximos de marzo y febrero. Si el S&P500 lograse salir del lateral comentado por la parte superior, sería un claro apoyo a las bolsas europeas para que por fin rompiesen al alza el lateral comenzado en febrero.
Volvemos a actualizar el gráfico del dólar frente al yen, ya que vuelve a presentar un comportamiento muy similar a las bolsas europeas. Se sitúa justo en 107 yenes por dólar, zona de máximos de marzo y final de febrero, así como la media de 50 sesiones. Esta misma semana, el primer ministro japonés, Shinzo Abe, pidió ayer al gobernador del Banco de Japón (BoJ), Haruhiko Kuroda, que implemente todas las políticas a su alcance para alcanzar la esquiva meta de inflación del 2% prevista actualmente para 2019. Esta noticia se ha tenido lugar tras la reelección de Kuroda al frente del BoJ durante los próximos cinco años. Por tanto, todo apuntaría a que el yen debería debilitarse, lo que iría en beneficio de los activos de riesgo en general.
Creemos que el gráfico del futuro del S&P500 que hemos adjuntado es fiel reflejo de la situación actual. Vaivenes constantes del mercado en torno a mínimos de febrero sin una tendencia clara del mercado. Además, este movimiento se está produciendo justo semanas antes de que empiece la temporada de publicación de resultados empresariales. Esta misma semana comienza la publicación de la gran banca norteamericana (Citigroup, JPMorgan y Wells Fargo el viernes), y la semana que viene sí que será el verdadero pistoletazo de salida de grandes grupos empresariales. De la evolución de las cifras de ventas y beneficios de estas primeras compañías dependerá en gran medida que los inversores vuelvan a fijarse en los fundamentales de las bolsas y no en las noticias intradía relacionadas con los aranceles entre China y Estados Unidos. Así ha sido siempre en términos históricos. Son los beneficios empresariales los que marcan la tendencia a largo plazo de las bolsas y las noticias como las actuales (aranceles) las que marcan los movimientos de corto plazo.
El artículo original se encuentra en el Blog de Unicorp Patrimonio S.V.
(http://blog.unicorppatrimonio....)