El sentimiento económico de la Eurozona parece que quiere comenzar a mejorar, después de más de 2 años de caídas continuadas. Evidentemente, el sentimiento sigue siendo muy negativo, pero apreciamos que la tendencia parece que quiere revertirse. Estamos en una situación en la que el mercado, desde nuestro punto de vista, ha descontado casi todo lo negativo que podría suceder, por lo que creemos que estamos ante una señal positiva de cara a los próximos.
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