Aunque a muchos se les haya olvidado, no es algo tan extraño ver un par de días consecutivos de números rojos en las bolsas. Bromas aparte, el tema del lunes ya ha sido ver si esta caída puede tener recorrido o simplemente se trata de una simple corrección sin importancia. Vamos a analizar la situación.
El S&P 500 ha empezado su caída justo cuando mas números parecía que tenia de romper al alza otra vez. En cuanto al motivo, todo parece indicar que una mezcla de datos macro algo decepcionantes combinados con problemas en países concretos como Argentina ha encendido el apetito vendedor entre los inversores. Yo personalmente no creo que sea debido a ninguna noticia en particular, sino más bien a que el mercado simplemente necesitaba un retroceso, ya que con noticias mucho peores hemos visto buenas subidas.
¿Dónde estamos?
De momento el S&P 500 ha perdido la cota de los 1800, rebasando la media de 50 sin detenerse por primera vez desde finales de verano, aunque en esa ocasión tonteo un poco antes.
Podemos ver como la caída actual ha dejado el índice justo en la línea de soporte, que ha dejado la anterior resistencia, lo que puede dar algo de estabilidad a la cotización.
En caso de perder este nivel, los 1700 coincidiendo con la media de 200 sesiones serian el próximo nivel altamente probable para ver.
En cuanto al volumen, vemos como en los últimos días se ha ido produciendo varios días de distribución (flechas rojas), algo que no suele ser buena señal.
En el Nasdaq, la situación es muy similar, y como vemos sigue dentro del canal que lleva dibujando desde verano.
El
McClellan
Oscillator, a pesar de pasar a
negativo, no muestra niveles de sobreventa todavía, ya que para eso tendríamos
que ver registros por debajo de -60
En cuanto a la volatilidad, parece que finalmente ha despertado de su largo letargo.
Aunque a nivel técnico, a día de hoy no hay porque alarmarse por la reciente debilidad del mercado, ya que no se ha roto ningún nivel serio de momento, varias personas ya me han preguntado si estas caídas pueden ser el preludio de algo mas serio. Sobre este tema, hay varios indicadores en niveles donde no suelen presagiar nada bueno, como una confianza entre los inversores en niveles nunca vistos, igual que los registros record que vemos en las compras a crédito en el NYSE.
Otro dato revelador es que el nivel actual de asimetría en el mercado de opciones. Lo que muestra que los precios de las opciones dan actualmente una elevada probabilidad implícita de ver acontecimientos que en teoría se situarían en la cola de la distribución normal.
En lo que a indicadores internos de mercado respecta, la nota negativa la pone el número de acciones por encima de la media de 200, que durante un tiempo lleva mostrando una divergencia bajista respecto al índice.
Sin olvidar que el mercado americano lleva meses en situación de sobrevaloración a nivel fundamental como ya vimos hace unas semanas en el artículo Los máximos históricos puestos en perspectiva: Los Fundamentales. Desde el artículo, el mercado incluso ha aumentado todavía más sus valoraciones.
En realidad vemos como elementos negativos no nos faltan para poder pensar que a esta corrección todavía le queda camino por recorrer.
Sin embargo, también hay indicadores internos de mercado, que no han apuntado en ningún momento hacia caídas contundentes, ni lo están haciendo ahora.
Un clásico de la profundidad del mercado como el Advance/Decline, a pesar de haber titubeado a finales de 2013, recuperó la tendencia, y se presenta como uno de los mayores apoyos actuales del mercado. Hay que recordad que en los mercados alcistas anteriores, este indicador siempre ha mostrado divergencia bajista durante meses antes del pico del mercado. En lo que llevamos de caída, esta aguantando mejor incluso que el índice.
No obstante no habrá que quitarle el ojo de encima a la media de este indicador, ya que ha hecho su pico hace ya varios meses, y se encuentra en clara tendencia bajista. Ver a la media de 200 del Advance/Decline cruzar por debajo de 0 si que seria un motivo para empezar a ver las cosas de forma mas pesimista.
En cuanto a otro indicador que mide la salud del mercado, el índice de nuevos máximos - nuevos mínimos, a pesar de la caída, tampoco ha mostrado debilidad, ni en valor absoluto, que hasta hoy no se ha puesto negativo, ni a nivel de medias, que siguen en zona positiva y todavía con bastante margenen, lo que es otro punto a favor que se suma el S&P.
El último aspecto positivo a destacar es que los líderes del mercado no han mostrado ninguna divergencia respecto al mercado, como ya vimos en la revisión del artículo sobre el sistema de Livermore de seguir a los líderes del ciclo para anticipar techos de mercado.
En conclusión a este tema, aunque los nubarrones efectivamente existen y desde hace tiempo a nivel fundamental, y que ahora mismo no aconsejaría a nadie entrar en la bolsa norteamericana con un horizonte a largo plazo, el timing en el día a día es otra cosa bien distinta. De momento, solo estamos viendo una situación de vuelta a la normalidad de un mercado sobrecomprado, por lo que no apostaría ahora mismo por el inicio de un gran mercado bajista a día de hoy.
De todas formas, recomiendo un buen control de los stops, ya que la volatilidad en las bajadas siempre es muy alta.
Y es que nunca debemos olvidar que las caídas forman parte
del juego.
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