Las consecuencias del sesgo de inmediatez, según Fisher Investments España

26 de noviembre, 2020 0
Fisher Investments España cree que un buen asesoramiento financiero puede ayudar a los inversores a sentirse más seguros, cómodos y preparados... [+ info]
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De acuerdo con la experiencia de Fisher Investments España, los inversores suelen pensar que lo que ocurre hoy persistirá en el futuro. En las finanzas del comportamiento, una corriente de opinión que estudia las relaciones entre el comportamiento humano, las emociones y el dinero, esto se conoce como sesgo de inmediatez y a continuación abordaremos su significado, así como sus peligros. Juzgamos de suma importancia que los inversores lo conozcan, sobre todo en un año tan turbulento como 2020. 

El sesgo de inmediatez es la extrapolación del pasado inmediato hacia el futuro. En los mercados financieros se manifiesta de diferentes maneras. Por ejemplo, si la bolsa ha caído recientemente, algunos inversores pensarán que la tendencia bajista continuará. Durante una buena racha, por otra parte, podría llevar a muchos a proyectar más ganancias. Incluso es posible aplicarlo a segmentos más reducidos como un país, un sector o un indicador económico. Así, si el PIB se desacelera, o incluso se contrae, el sesgo de inmediatez puede abocar a muchas personas a pensar que la debilidad económica persistirá.

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2020 ha sido pródigo en ejemplos similares. Al principio del año, los titulares de la prensa económica que seguimos daban por hecha la continuidad del mercado bajista más allá de su verdadero final real, a finales de marzo. Del mismo modo, cuando las economías de todo el mundo entraron oficialmente en recesión, algunos analistas previeron que el impacto se extendería más allá de 2020 y que pasarían años antes de que una eventual recuperación elevara la actividad a sus niveles anteriores a la pandemia. Algunos expertos ya han comenzado a actualizar sus aciagas proyecciones. El Fondo Monetario Internacional (FMI) revisó al alza sus previsiones para 2020 de la economía internacional debido a que la coyuntura mejoró más de lo previsto entre abril y septiembre. El Banco Central de Irlanda, por su lado, estima actualmente que el PIB crecerá un 0,4%, una llamativa revisión de su pronóstico de julio (-9%). El último caso de sesgo de inmediatez se relaciona con la inestabilidad del sector tecnológico en septiembre, para algunos señal de que se avecinan dificultades, como, otra vez, si el pasado pudiera determinar el futuro.

Si bien lo sucedido copa a menudo los titulares, las investigaciones de Fisher Investments España revelan que la renta variable se proyecta hacia el futuro, es decir, se centra principalmente en factores económicos y políticos que puedan influir en los beneficios empresariales a entre 3 y 30 meses vista. Por ejemplo, ¿cuáles son las condiciones del crédito? Si las empresas se topan con dificultades para endeudarse, el crecimiento económico podría ralentizarse en el futuro próximo, ya que dispondrían de menos capital para emprender nuevos proyectos. O, en el ámbito político, ¿qué probabilidad hay de que un Gobierno de un país avanzado apruebe leyes que aumenten la incertidumbre o genere nuevos ganadores y perdedores? Es más, ¿cómo se relacionan estos factores económicos y políticos con el ánimo inversor? 

A nuestro juicio, las cotizaciones pasadas ejercen poca influencia sobre los motores del mercado bursátil. De lo contrario, la mera lógica dictaría que los países y los sectores más rentables en los últimos tiempos seguirán siéndolo indefinidamente. Sin embargo, el análisis de Fisher Investments España demuestra que la rotación del liderazgo es inevitable. Desde 1999, el nuevo sector de las tecnologías de la información comenzó a batir por mucho al conjunto del mercado hasta el final de la racha alcista que concluyó en 2000. En el subsiguiente mercado bajista, con todo, el sector se depreció en mayor medida que el mercado y, además, registró rentabilidades inferiores en el siguiente mercado alcista. Los que se dejaron llevar por el sesgo de inmediatez y extrapolaron las fuertes ganancias de los noventa hacia el futuro, se toparon con la cruda realidad de la siguiente década.

En el caso de los países, también contamos con numerosos ejemplos. Los mercados financieros de fuera de EE.UU. superaron a este en el mercado alcista mundial del periodo 2003-2007.Tras la mala racha comprendida entre 2007 y 2009, aquellos cuyo sesgo de inmediatez les llevó a pensar que este statu quo se prolongaría, asistieron al liderazgo estadounidense en 8 de los 11 ejercicios del intervalo 2009-2019.

En Fisher Investments España somos del parecer de que el sesgo de inmediatez puede afectar negativamente a las decisiones de los inversores, abocándoles a buscar rentabilidades pasadas y a desaprovechar oportunidades solo porque lo que acaba de suceder nubla su percepción. Para combatirlo debe preguntarse si su punto de vista se ve influido por el pasado reciente. Si es así y le resta importancia al escenario que se presenta por delante es posible que haya incurrido en el sesgo de inmediatez. Además, valore si su decisión está en sintonía con sus objetivos financieros a largo plazo. Si el sesgo de inmediatez le afecta profundamente, ya sea en forma de miedo o de avaricia, retome su plan de inversión a largo plazo. ¿Actuar según el pasado reciente podría aplazar la consecución de sus objetivos? Tras años de experiencia, en Fisher Investments España pensamos que para lograr buenos resultados deben mantenerse a raya las emociones. Ser conscientes del sesgo de inmediatez es un importante paso para lograrlo.

Fisher Investments España es el nombre comercial utilizado por la sucursal en España de Fisher Investments Ireland Limited, (“Fisher Investments España”). Fisher Investments España está inscrita con domicilio social en calle Junta de Castilla y León, 8, 28660 Boadilla del Monte (Madrid), con NIF W0074497I, inscrita en el Registro Mercantil de Madrid, en el tomo 39501, folio 110, inscripción 1, hoja M-701327, y en el Registro de la Comisión Nacional del Mercado de Valores de Empresas de Servicios de Inversión del Espacio Económico Europeo con Sucursal en España, con el número 126.
El presente documento recoge la opinión general de Fisher Investments España y Fisher Investments Europe, y no debe ser considerado como un servicio de asesoramiento personalizado en materia de inversiones o fiscal, ni un reflejo de la rentabilidad de sus clientes. No existe garantía alguna de que Fisher Investments España o Fisher Investments Europe sigan sosteniendo estas opiniones, que pueden cambiar en cualquier momento a partir de nuevos datos, análisis o consideraciones. La información aquí contenida no pretende ser una recomendación o pronóstico de las condiciones del mercado. En su lugar, tiene por objeto esclarecer los aspectos tratados. Los mercados actuales y futuros pueden diferir ampliamente de los que se describen en este documento. Asimismo, no se garantiza la exactitud de ninguna de las hipótesis empleadas en los ejemplos contenidos en este documento. Invertir en los mercados financieros implica un riesgo de pérdida, y no hay garantías de que todo o parte del capital invertido sea reembolsado. La rentabilidad pasada no garantiza ni indica los resultados futuros de manera fiable. El valor de las inversiones y los ingresos procedentes de ellas están sometidos a la fluctuación de los mercados financieros mundiales y de los tipos de cambio internacionales.
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