“Los Angeles Times” o “Chicago Tribune” son algunas de las marcas más reconocidas de los periódicos que abandonarán Tribune Company mediante un spin-off llamado Tribune Publishing. Después de un largo proceso de concurso de acreedores, que acabó el diciembre de 2012, el conglomerado de medios de comunicación sigue la estela de otros competidores como News Corporation o Time Warner y se deshará de las publicaciones en papel, el negocio que presenta más dificultades para prosperar, a mediados de 2014.
La nueva Tribune Publishing Company se llevará con ella las publicaciones que impulsaron la fundación de la corporación; hace más de un siglo y medio, el año 1847. Contará con los rotativos Sun Sentinel, Orlando Sentinel, Baltimore Sun, Hartford Courant, The Morning Call o el Daily Press. Un 98,5% del capital social se repartirá entre los accionistas, mientras que la compañía madre conservará un interés minoritario.Tribune Publishing también estará constituida por la agencia de administración y servicios de back-office Blue Lynx Media y otras participaciones mayoritarias en CIPS Marketing Group, Homefinder.com y LocalityLabs.
La original Tribune Company se quedará con el segmento de broadcasting, formada por 42 canales de televisión por cable y varias emisoras de radio con licencias en Estados Unidos. Por otro lado, las propiedades inmobiliarias valoradas en 214 millones de dólares completarían el pastel. Algunos analistas sugieren una posterior división con forma de sociedad inmobiliaria – una REIT, por ejemplo. Esto aglutinaría todas las propiedades y se aprovecharía de las rendas inmobiliarias pagadas por los mismos medios de comunicación, que hasta ahora forman Tribune.
La operación corporativa, traducida en un futuro spin-off, es la respuesta al asedio de las redes sociales y las publicaciones digitales a los medios tradicionales que no se han adaptado a la revolución informática. La publicidad es el método de financiación principal y representó un 62% de los ingresos en 2012 de Tribune. La pérdida de lectores/suscriptores ha conducido a los anunciantes a la diversificación, y esto ha impactado directamente a los beneficios de los medios. Según la misma presentación de la nueva compañía: “Esperamos que la demanda publicitaria continúe afectada por los cambios en las condiciones económicas y la segmentación del mapa comunicativo”
Nuevas ideas es lo que necesitan los periódicos que constituirán la nueva Tribune Publishing. El mismo reto al que se enfrentan otras publicaciones como Washington Post o el New York Times, que hasta ahora habían evocado a la importancia del cuarto poder como fundamento principal de su subsistencia. Potenciar las revistes o apostar por su presencia en la red, son algunas de las opciones para que estas grandes marcas sobrevivan contra el alud de pequeñas publicaciones on-line, creadas por un solo periodista, que poco a poco se comen su dominio.