Con esta pieza comienzo una serie de artículos sobre algunos aspectos relativos a los fondos de inversión que, o bien me han llamado la atención, o bien creo que valen la pena comentar.

Hagamos un ejercicio. Si le menciono "fondo de inversión mixto flexible" ¿qué nivel de riesgo le viene rápidamente a su cabeza? Anótelo y no me lo diga.
Una de las cosas que más me ha sorprendido desde que asesoro el compartimento de fondo de inversión Ítaca Global Macro, es la confusión que existe a la hora de categorizar algunos fondos de inversión por parte de las compañías que se dedican a difundir datos sobre los mismos. Las hay que lo hacen correctamente, otras se atragantan en la tarea y luego están las que llevan a sus clientes a un completo error, etiquetando un fondo en la categoría que no corresponde.
Por supuesto, si algunas empresas que se dedican a esto fallan en categorizar correctamente determinados fondos, huelga señalar que la confusión está igualmente extendida entre amplias capas de inversores.
No tengo estadísticas para avalar como de extendida está la siguiente idea, pero lo cierto es que continuamente veo inversores que por alguna razón asumen que un "fondo mixto flexible", por definición debe ser un fondo más conservador que uno de renta variable.
Desconozco la razón exacta y el contexto histórico -agradeceré comentarios al respecto- aunque sospecho que detrás pudiera estar la fuerte bancarización de la economía española, en tanto en cuanto que ha aplicado estándares rígidos durante mucho tiempo.
Sea como fuere, esta tabla que publica Inverco en su web, aclara desde el punto de vista normativo español como se categorizan los fondos de inversión.

De esta manera los principales fondos de inversión, dejando a un lado los monetarios, garantizados, absolutos y pasivos que son de otra naturaleza, básicamente pertenecen a 4 categorías que se determinan según el grado de exposición a renta variable que pueden alcanzar:
Fondo renta variable invierte más del 75% en acciones
Fondo renta variable mixta, entre el 30% y el 75% en acciones
Fondo renta fija mixta, menos del 30% en acciones
Fondos renta fija, 0% en acciones
Y la pregunta es ¿dónde están los "fondos mixtos flexibles"? Esos de los que se habla bastante -en Google aparecen 420.000 resultados- y que muchos inversores quieren tener. Sencillamente en España no existen.
El problema se encuentra en que, a la hora de categorizar, la legislación española establece la llamada categoría "Global" que acoge "fondos cuya política de inversión no encaje en ninguna de las vocaciones señaladas anteriormente". Es decir, es una categoría cajón de sastre donde cabe todo lo que no está en la lista. Sin embargo, esta fórmula regulatoria española encaja pobremente con la práctica internacional (1) y con la práctica más actual de muchas gestoras (2), especialmente las independientes que se guían por criterios más prácticos que por estándares industriales.
Práctica internacional
En el extranjero cuando se dice "global" -así, en inglés- no se quiere decir que es un fondo que pertenece a un cajón de sastre o limbo burocrático, sino que el fondo tiene una vocación global: de invertir en bonos globales, de invertir en acciones globales o de invertir de forma mixta alrededor del globo. Es decir, global vendría a significar internacional sin restricciones geográficas.
Y lo que sí existe más allá de los Pirineos es una categoría llamada "Mixtos Flexibles", en la que un fondo puede invertir en acciones y bonos sin constricciones porcentuales predeterminadas, una clase de fondos que sin embargo no existe de forma oficial en España ya que en España se llama "Global". Esta disonancia entre regulación local y práctica internacional, hace que las gestoras españolas utilicen la fórmula "Mixto Flexible" en los nombres de los fondos, pero que, como se observa en el siguiente ejemplo, en realidad su categoría oficial sea "renta variable mixta", es decir, que no es tan flexible porque no puede invertir más del 75% ni menos del 30% del patrimonio en acciones.

Por tanto, desde el punto de vista regulatorio y cultural, la palabra "mixto" referido a un fondo de inversión se asocia a un menor grado de exposición en renta variable, que por sus mayores oscilaciones en los precios es considerada, de forma errónea, más arriesgada que otros activos.
Pero en la práctica internacional, es decir en la realidad, un mixto simplemente es un mixto, un fondo que invierte en acciones y bonos. Si por política de inversión invierte más en bonos que en acciones, entonces será considerado mixto conservador y si por política de inversión invierte más en acciones que en bonos, se le considerará mixto agresivo. Y si por política de inversión no establece que grado máximo de renta variable o de renta fija puede alcanzar, entonces se le llama fondo mixto flexible. Generalizando, los fondos mixtos flexibles pueden estar invertidos al 100% en renta variable a pesar de no ser un fondo de renta variable. Y al día siguiente pueden estar al 100% en liquidez sin ser un fondo monetario.
Esta categorización es más razonable -y racional- que la dispuesta por la legalidad española y abarca una realidad bastante amplia. Al fin y al cabo, Citywire lista 2.265 fondos de inversión mixtos flexibles denominados en euros.
Práctica actual gestoras
Por otro lado, algunas gestoras y asesores, especialmente gestoras ajenas a los grandes bancos, no tienen reparos en registrar en España un fondo como "global" desde el punto de vista regulatorio cuando en realidad su fondo, de forma material, es un fondo de renta variable porque solo invierte en acciones.
Estas gestoras y asesores eligen esta opción porque si en un determinado momento no ven oportunidades, no quieren atarse a un porcentaje mínimo de inversión en renta variable. Lo cierto es que es algo contradictorio que un gestor enfocado en el mercado de acciones piense que se mire por donde se mire todas las acciones están a precios de burbuja, y aún así tenga que comprarlas a la fuerza por cómo ha categorizado su fondo. Es por esto que algunos gestores de renta variable prefieren registrar su fondo como "global", es decir, "mixto flexible" en lenguaje internacional.
El siguiente ejemplo, el fondo Gestión Boutique / Bissan Value Fund es un fondo que se centra en renta variable y aún así está categorizado como global.

Cada gestor que categoriza un fondo como global en España y que en la práctica es un mixto flexible, vendrá con un razonamiento diferente. Unos son inversores en acciones pero no quieren atarse a porcentajes, otros tienen un fuerte enfoque en acciones pero podrían quedarse en liquidez al 100% o al 80% y para eso necesitan un mixto flexible. Otros invierten decididamente tanto en acciones como bonos, es decir son fondos mixtos flexibles con ideas fuertes en diferentes momentos y no encajan en las categorías mixtas de la regulación local.
En resumen: desde el punto de vista normativo, los llamados fondos mixtos en España nunca pueden exponerse más de un 75% a la renta variable, pero hay una categoría reconocida a nivel internacional no regulada en la legislación española que se llama "Mixtos Flexibles" y que son mixtos porque pueden invertir en acciones y bonos sin límites externos. Estos fondos mixtos flexibles, no solo pueden tener el mismo perfil de riesgo que un fondo de renta variable, sino que en muchas ocasiones, desde varios puntos de vista, pueden ser fondos más agresivos que un fondo clásico de acciones.
Alguien me dijo una vez que cuando se pone una interrogación en un título de un artículo, según como estuviera redactado, ya se sabía si la respuesta era sí o no. En este caso, había que elaborar más.