​La información

8 de octubre, 2015 0

La información es la diferencia entre unos y otros.

Las personas de hoy en día, tienen acceso a una alimentación mínimamente adecuada, pueden abusar de alimentos basura si lo desean, eso ya es otra cosa, pero de entrada, al menos en Europa ya no pasan hambre y prácticamente han desaparecido enfermedades relacionadas con la desnutrición como por ejemplo el raquitismo, algo que en los 50 e incluso en los años 60 era bastante frecuente, y había muchas más enfermedades causadas por la malnutrición, además que la diferencia entre la clase alta y la clase baja (y este nombre no es casualidad), alcanzó en los 60 una diferencia media de 25 centímetros.

El incremento de la altura media, ha hecho que esa diferencia se reduzca a una media de 14 centímetros, que si no pasa nada raro, tenderá a seguir disminuyendo en el futuro.

No es casualidad que la inmensa mayoría de los miembros de las clases reales, o todos aquellos grupos de poblaciones que llevan más de 3 generaciones seguidas sin pasar hambre, tengan una altura muy superior a la media.

Tampoco es casual que de media, los hijos de las personas normales sean en la mayor casos más, o mucho más altos que sus padres.

Dado que desde hace ya unas cuantas décadas, la realidad es esta, y dado que una nutrición mínimamente adecuada en la época de crecimiento afecta a la inteligencia, la diferencia entre unos inversores y otros no está en la inteligencia, que es algo que sale perjudicado con la malnutrición.

La diferencia está en la información.

Y no hablamos de la información privilegiada, que además de ilegal, es bastante difícil de conseguir y mucho menos de manera continuada.

Con la información adecuada una persona o una empresa, puede llegado el caso hacer mucho o muchísimo dinero, esto lo saben bien los hackers del gobierno de los ojos rasgados, que tratan (y consiguen de vez en cuando), de obtener información sobre sus competidores de otras partes del mundo.

Por cierto, el código informático de una empresa mínimamente grande contiene un mínimo de 60 millones de líneas de código.

Cada vez que la empresa se pone a funcionar y operan usando la red, es como si abrieran millones de puertas a la vez, puertas que al menos en teoría se cierran todas, tras ser abiertas.

Pero en realidad, es imposible que 60 millones de líneas de código, o más, no tengan fallos, y esto es así porque los programadores son seres humanos y porque existe, tanto en España como en el resto de los países, programadores, que o bien por hacerle sabotaje a la empresa, o bien por pereza o por venganza hacia la empresa, esto último no se comenta mucho, pero está detrás de ciertas anomalías que afectan por aquí y por allá a empresas de todo el mundo.

Recordemos lo que le pasó a Amazon en Reino Unido el año pasado, en diciembre, cuando durante unas horas cualquiera pudo comprar cualquier cosa a 0.01, y se las enviaban a casa y una vez enviadas, según las leyes, la empresa no puede reclamar nada.

¿Alguien se cree que eso fue un fallo?.

Eso fue un acto de sabotaje, y como siempre pasa, para no asustar a los clientes, la empresa no aporta más información al respecto y lo oculta todo debajo de la alfombra, una práctica por cierto más normal de lo que parece.

Este es un simple ejemplo, porque suceden muchas más cosas a todos los niveles, eso de crear puertas traseras en el código de una gran empresa es algo ilegal, pero sirve para llamar la atención sobre como existen y continuarán existiendo individuos que son capaces de obtener beneficios en cualquier sistema, y de cualquier forma.

Desde que existen los candados, las cárceles, los casinos, los cajeros automáticos, las tarjetas de móviles, las tarjetas de crédito, los bancos, el sistema capitalista, el sistema comunista(pues si, también tiene fallos y también es explotable), la distribución mayorista, el prestamismo, los mercados financieros, los casinos, o las partidas de cartas o dados, hay personas que se enfrentan a estos sistemas, esperando que les sonría la suerte y otras, una minoría, miran los sistemas con ojos de lobo y se hacen la siguiente pregunta: ¿Dónde están las vulnerabilidades?, ¿Cómo puedo explotarlas en mi beneficio?.

El que se hace estas preguntas cambia su forma de ver las cosas, ya no depende del azar, ahora se sostiene sobre sus propias piernas y depende de si mismo, y depender de uno mismo es lo más grande que existe, es algo que engancha, ese es el motivo, por el que un empresario al que le han ido muy bien las cosas, si lo pierde todo o casi todo, termina en muchos casos suicidándose.

Cuando uno conoce la libertad, nunca y repito nunca, aceptará rebajarse a la condición de exclavo asalariado.

Eso de ser un simple peón, no es nada divertido.

Esto también explica porque, cuando vienen mal dadas algunos hombres de negocios empiezan a realizar actividades ilegales.

Recordemos que en la naturaleza, para sobrevivir vale cualquier cosa.

Ningún sistema es perfecto, todos tienen defectos, vulnerabilidades, la información sobre esas vulnerabilidades cuesta tiempo y esfuerzo, ese es el precio a pagar.

Pero quién busca, encuentra.

Esto de final encierra una respuesta a una pregunta, tal vez la pregunta que te has estado haciendo desde hace unos días/semanas/meses o años, desde que descubriste la bolsa y te parece un quiero pero no puedo.

El mercado financiero sube y baja, baja y sube, se compra y se alquila, pero al finalizar cualquier año, en cualquier bolsa del mundo, la subida o bajada acumulada de las acciones es imposible que sea la misma.

Nunca veremos a las 35 acciones del ibex, cerrar todas con una subida o una bajada de por ejemplo el 30%.

Siempre habrá diferencias, unas subirán un +40%, otras terminarán con un -18% o con un +3%, y siempre, incluso en los años más catastróficos, un grupo de acciones terminarán en la cabeza y otro grupo terminarán en la cola.

Retrocedamos en el tiempo, octubre del 2008, ibex 35 caía alrededor del 50%, una acción, a la que llaman Unión Fenosa sube un +13%, 5 acciones bajan entre un -20% y un -30%, en la cola un grupo de 7 acciones, caen entre un -60% y un -78%.

En ese año tan terrible bajo el punto de vista tradicional, una persona, podía estar ganando en esas mismas fechas alrededor de un +20%, con un esquema más volátil, y con un esquema menos volátil y para mí mucho más conservador de lo que parece, un +14.75%.

Esa persona estaría alcista y bajista en unas acciones del ibex 35 en el primer caso, y alcista en unas acciones y bajista en el índice en el segundo caso.

No son ganancias para echar cohetes, pero hay que darse cuenta de un detalle, si en años bajistas, tu eres capaz de ganar algo, ya tienes muchísimo a tu favor.

Hace unos años la bolsa de Islandia se derrumbó en un solo día, un -77%, hablamos del índice.

Esto por cierto, creo que es un record mundial de caída en un solo índice en un solo día.

Es buena cosa saberlo y es buena cosa pensar que es lo que te puede pasar si sucede algo similar en el índice en el que inviertes, yo en un caso como ese hasta puedo ganar algo, y si pierdo probablemente no pasaría del -10%, y eso en el peor de los casos y con una caída del índice del -77%.

A pesar de eso el país va de maravilla, y desde luego, dejando de lado el frío y los osos polares que aparecen de vez en cuando en la costa (se quedan atrapados en el hielo y pasan varias semanas pasando hambre, hasta que llegan a las costas islandesas), y las zonas pantanosas, dejando esos detalles, allí arriba se vive mil veces mejor que en este país del Sur llamado España.

Es un índice compuesto por muy pocas acciones, pero como siempre, hubo acciones que cayeron muchísimo más que el propio índice y hubo acciones que cayeron menos.

Esto es un fallo del sistema financiero, que por si alguien lo duda es altamente ineficiente, y desde luego es una vulnerabilidad explotable.

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